Massa pone bajo la lupa a organismos del Estad

El ministro de Economía, Sergio Massa, colocó al orden fiscal como una de sus prioridades. Sus primeras medidas se orientaron en ese sentido y se refiere a la cuestión cada vez que habla en público o en privado. La última mención fuerte fue en el marco de la reunión de Gabinete del miércoles, en la que puso bajo la lupa la entrega de fondos a organismos del Estado, que en algunos casos tienen presupuestos enteros a plazo fijo. Silvina Batakis había adjudicado a las provincias una conducta similar.

“Vienen a pedir fondos al Tesoro y tienen sus presupuestos a plazo fijo”, en ese tono fue el señalamiento que hizo Massa en la reunión de Gabinete a los organismos descentralizados. La advertencia apunta a que se utilicen los recursos que hoy están volcados en distintos instrumentos a través de fondos comunes de inversión en lugar de aumentar la cuenta de gastos de la administración nacional.

Fuentes oficiales sostuvieron que Massa, que estaba acompañado por el secretario de Hacienda, Raúl Rigo, «no se refirió a nadie en particular», sino que quiso poner sobre la mesa una dinámica que se da en distintos organismos del Estado. El ministro viene teniendo diálogo con funcionarios encargados de la ejecución de cada uno de los ministerios para elaborar una lista de prioridades, atendiendo a que solo se gastará lo que ingrese a la caja del Estado.

Un planteo similar pero con distinto destinatario había realizado Batakis. En su corto paso por el Palacio de Hacienda, semanas atrás, la actual presidenta del Banco Nación reclamó a los gobernadores que mientras todas las provincias mantenían superávit fiscal con crecientes giros discrecionales, el Estado nacional incrementó su déficit. La exministra llegó a detallar que una jurisdicción tiene 13 meses de pago de sueldos apalancados en un plazo fijo

En su primera conferencia de prensa Sergio Massa afirmó que se cumplirá la meta de desequilibrio fiscal de 2,5% del PBI acordada con el Fondo Monetario Internacional para este año. Para eso, anunció una serie de medidas destinadas a reducir el gasto público: un recorte de subsidios a la energía mucho más agresivo que el que se había pautado, el congelamiento de la planta de empleados del Estado y, en sintonía, el cese de la utilización de los adelantos del Banco Central al Tesoro.

Según un relevamiento reciente de la consultora PxQ, tras la actualización de las proyecciones del FMI, el Gobierno logró cumplir con la meta fiscal fijada en el acuerdo de Facilidades Extendidas para junio de 2022. Aunque dicho informe señala que en adelante será difícil respetar lo pautado con el Fondo porque “históricamente el segundo semestre es la etapa del año donde más crece el déficit”.

En esa línea, la firma que conduce Emmanuel Álvarez Agis destaca que el rojo durante los últimos seis meses de 2016 duplicó al de el primer semestre, algo similar ocurrió en 2017 y 2018. La comparación más cercana, el año 2021, muestra un primer semestre con un déficit inferior al 0,5% y un segundo semestre con un rojo que superó el 2,5%.

En este caso, pareciera que la inflación podría hacer parte del trabajo de licuar el gasto. El Gobierno viene sosteniendo que no se gastará más que lo presupuestado, que fue calculado en la última modificación con una inflación base del 62%, mientras que el Relevamiento de Expectativas de Mercado ya estima un 90%.

Fuente: Ambito.com