Un buen desayuno es la clave para no subir de peso

Si aprovechamos esta comida nos permitirá afrontar mejor las demás etapas del día.

“Cuando desayunamos tenemos varias horas de ayuno, entonces el alimento que consumís es utilizado casi por completo por el cuerpo, es más difícil que haya exceso y acumules grasas”, explicó el entrenador personal Gustavo Baggetta.

Consejos para mantenerse

Una de las cosas más habituales que escuchamos es que lo mejor es que el resto de las comidas del día no sean tan pesadas. Esto, según Baggetta, es más fácil de lograr con un buen desayuno, ya que “de por sí el almuerzo no va a tener que ser tan pesado, no deberías tener muchas ganas de comer. El almuerzo puede ser normal, ni muy bajo, porque queda todo el día, ni tampoco excesivo”.

En cuanto a las cenas, el consultado sostuvo que “siempre es mejor mantenerlas livianas. Acostarse con la panza llena puede ocasionar dificultades con la digestión y que no se utilicen bien los nutrientes, lo que puede generar aumento de peso”.

En tanto, sostuvo que “es bueno no saltearse la merienda porque, como dijimos, lo mejor es una cena liviana. Si llegamos con mucha hambre va a ser más difícil lograrla”.

Para finalizar, el entrenador personal indicó que lo mejor es no irse a un extremo si queremos bajar de peso. “Bajar de peso sin sufrir significa aprender a comer bien, no es morirse de hambre. Si uno tiene un objetivo y te morís de hambre para cumplirlo, cuando llegues es probable que tengas un efecto rebote y para el organismo eso es malo”, sostuvo.

Deja una respuesta