El Gobierno español justificó la aplicación de la Constitución para restablecer la legalidad en Cataluña por la «desobediencia rebelde, sistemática y consciente» de las autoridades regionales independentistas a las leyes nacionales y porque sus decisiones «atentan gravemente» contra el interés general.

«Aplicamos el artículo 155 porque ningún gobierno puede aceptar que se viole la ley«, afirmó el presidente Rajoy en una conferencia de prensa este sábado.

Se decidió destituir a Carles Puigdemont y recortar las competencias del Parlamento catalán. También se anunció la voluntad de convocar elecciones en Cataluña en menos de seis meses, «tan pronto como se recupere la normalidad institucional».

«Se liquidó la Constitución española en Cataluña«, dijo en su discurso Rajoy, quien acusó al Govern de impulsar un proceso «que ha buscado el enfrentamiento«.